Y miraban sorprendidos como un perro se subía a una micro, la nuestra, siendo que se habían perdido ya parte de "el espectáculo", que fue cuando éste decidió subirse a la micro. Estaba en el paradero, al cual la micro aún no llegaba producto del atochamiento a.k.a. taco y estiraba su cuello para fijar la mirada en la micro, otrogándole el carácter de "la micro que iba a tomar". Buscaba un espacio y se disponía a dormir un rato hasta tener que bajar, ojalá en la parada indicada, la de su destino, sin haberse pasado por "pegar un ojo".
¿Que es lo asombroso? ¿Que esperó en el paradero correcto? ¿Que subió, validó , saludó y buscó un lugar lo más atrás posible? ¿Que tenía plata en su Bip!?.
Ah claro!!; que era un perro, cómo no haberlo visto. Es que la gente repara mucho más en la forma que en el fondo, tanto así que nunca llegan al fondo de nada y se pierden en la forma.
Por eso (casi) todos eligieron a
Y si no el sistema que!
Notable la frase final.
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